Las ventajas del uso del blockchain en el sector energético

1 diciembre, 2022

El mundo de la energía está en plena transformación para afrontar los retos que se le plantean. El cumplimiento de los objetivos climáticos, la necesidad de garantizar el suministro, la introducción de nuevas energías verdes como el hidrógeno o la globalización de las operaciones, son algunos de ellos.

La tecnología juega un papel crucial a la hora de abordar estos desafíos. El sector energético es tradicionalmente innovador y los últimos avances se abren paso para, entre otras cosas:

  • Cubrir nuevas necesidades
  • Operar con mayor seguridad
  • Controlar los costes
  • Impulsar la economía circular
  • Mejorar la eficiencia
  • Reducir el impacto ambiental

El uso de inteligencia artificial, del big data o del “Internet de las Cosas” es cada vez más habitual para configurar esos nuevos escenarios, como también lo es el empleo de blockchain; quizá, una de las tecnologías que va a facilitar –a modo de eje vertebrador- el despliegue de otras muchas.

Qué es el blockchain

Se conoce como blockchain o “cadena de bloques” a la tecnología de seguimiento de activos que facilita el registro de transacciones de una forma inmutable. Se trata de un proceso compartido donde todos los registros y transacciones están divididas en un gran número de bloques de información, por lo que no es posible alterar los activos. La cadena de bloques se basa en la confianza que aportan los millones de bloques que la componen, lo que aumenta la seguridad del activo, reduce los riesgos y los costes.

El blockchain es la tecnología de seguimiento de activos que facilita el registro de transacciones de una forma inmutable

Blockchain en el sector energético, hoy y en el futuro

La tecnología blockchain es una realidad ya en el sector energético y se postula también como un activo clave con un inestimable valor en su futuro. Tiene múltiples ventajas:

  • Proporciona datos de forma inmediata, lo cual ofrece un beneficio adicional a los procesos, negocios o proyectos que requieren información rápida y exacta. Con lo cual, puede ser fundamental en el entorno actual, donde la información y el conocimiento que proporciona el análisis de grandes cantidades de datos tienen tanta importancia.
  • Ofrece la máxima transparencia, ya que los bloques de datos son compartidos y se almacenan de forma distribuida. Esto garantiza que no pueden ser alterados y que solo puedan acceder a ellos los miembros autorizados; pero nadie los puede modificar, ni siquiera el administrador del sistema.
  • Está basado en la confianza. Una red de blockchain se construye mediante bloques que, a su vez, se construyen mediante grupos de datos. Todos los usuarios comparten una única fuente de información que no pueden alterar al componerse de millones de pedazos; pero sí pueden realizar el seguimiento de cada proceso de principio a fin.
  • Aporta mayor eficiencia en los procesos, ya que el empleo de una cadena de bloques, su aprovechamiento y la participación en la misma no supone crear, gestionar y operar toda la cadena. Se trata también de un proceso colaborativo y compartido, cada usuario o máquina realiza su aportación, que es necesaria para garantizar la seguridad, la inmutabilidad y la confianza. Sin embargo, todos los miembros pueden utilizar el resultado de toda la cadena de bloques y realizar el seguimiento de todos los detalles.
  • Los miembros de la red deben alcanzar un consenso sobre todas las transacciones y la precisión de los datos. Esto, sumado al registro permanente de cada acción, la validación de cada paso y la garantía de inmutabilidad, donde nadie puede hacer una alteración por sí solo, ofrece una mayor seguridad.

La tecnología blockchain es una realidad en el sector energético y se postula como un activo clave con un inestimable valor en su futuro

Cómo se puede utilizar el blockchain en el sector energético

Información global del mercado energético

El proceso de la energía puede ser realmente complejo, con muchos pasos y diferentes actores. Por ejemplo, desde la extracción del gas en sus yacimientos, hasta la inyección en la red, hay todo un proceso: licuefacción, transporte, compra, venta, medición, distribución, etc.

Un sistema de información que pueda respaldar cada paso y ofrecer una visión integral de todo el proceso mediante blockchain puede ser de gran utilidad. Aporta agilidad, eficiencia, anticipación, transparencia, trazabilidad, colaboración y todo ello… sin necesidad de interacción humana.

Regulación, cumplimiento y comprobación

Las empresas energéticas deben cumplir una legislación muy exigente que requiere de la provisión de grandes cantidades de datos. Estos se deben recoger, comprobar y analizar, utilizando muchos recursos. En todo momento, es importante que los datos y la información no se vean comprometidos, ante posibles casos de filtraciones y otros fallos de seguridad.

En ambas circunstancias, el blockchain puede ser de gran ayuda, mediante una plataforma que permita compartir la información entre empresas y reguladores.

Acreditación del origen de la energía

Como tecnología inalterable que registra cada interacción, el blockchain puede garantizar el origen de la energía en tiempo real.

De este modo, las empresas y usuarios finales pueden asegurar que el suministro de energía es 100 % renovable. Así se puede, por ejemplo, garantizar el empleo de hidrógeno verde a través de todas las etapas de producción y distribución; y por tanto, la neutralidad de carbono.

Ciberseguridad

El sistema energético es vital para cualquier país. Existen y se utilizan diversos sistemas para garantizar esa seguridad. El blockchain ofrece un paso más. Por ejemplo, permite el almacenamiento de datos de forma distribuida —si se “ataca” un servidor no se pierde la información porque está en otros—, también necesita de una verificación por distintas partes para ciertas operaciones o la trazabilidad de todas las decisiones.

Criptomonedas

Las compras y ventas de energía podrían realizarse mediante el uso de criptomonedas, que es un dinero virtual basado en tecnología blockchain. De este modo, el proceso podría ser más transparente. Ya existen algunas pruebas en este sentido: las govcoins, por ejemplo, son criptomonedas estatales canjeables por servicios públicos, como la electricidad.

La transformación digital y sostenible del sector de la energía ya ha comenzado, con un marcado carácter innovador y tecnológico. Existen muchas formas de abordarla, pero sin duda, el blockchain va a ser una llave que permitirá abrir numerosas puertas en favor de la eficiencia, la transparencia y la seguridad.