El viaje a la sostenibilidad que ha emprendido Brasil, uno de los principales productores de energías limpias del mundo, podría acelerarse con ayuda del denominado hidrógeno verde o renovable. Por el camino, aspira a reducir su dependencia de los combustibles fósiles y reforzar su liderazgo económico en la región, ya que es el país con el mayor producto interior bruto (PIB) de Latinoamérica.
Brasil cumple las condiciones para convertirse en uno de los principales actores de la economía del hidrógeno verde a nivel mundial. Además de una industria sólida y una infraestructura energética bien establecida, cuenta con vastos recursos.
Según datos de diferentes actores del sector en Brasil, incluido el Ministerio de Minas y Energía (MME), el país tiene la posibilidad de llevar sus costes de producción por debajo del promedio mundial. Entre tanto, la Secretaría Nacional de Transición y Planificación Energética brasileña cifra el potencial de producción de hidrógeno en 1,8 gigatoneladas al año. Esas expectativas responden, principalmente, a cuatro factores clave:
El potencial de producción de hidrógeno de Brasil se cifra en 1,8 gigatoneladas al año
Brasil ha activado diferentes iniciativas para impulsar la inversión en hidrógeno renovable. En 2023, lanzó el Pacto de Hidrógeno Renovable con el apoyo de gobiernos regionales, asociaciones privadas -principalmente en el campo de las energías renovables- y organizaciones internacionales.
Dicho pacto, que estará activo hasta el año 2025, busca el fortalecimiento de la producción de hidrógeno limpio a través de 65 acciones específicas, donde se destaca la inversión en investigación, desarrollo e innovación (I+D+i).
Otro hito para impulsar la economía del hidrógeno verde en Brasil es el Plan Energético Nacional 2050, del Ministerio de Minas y Energía, en el que se describe a este vector energético como una tecnología disruptiva y un elemento estratégico para la descarbonización del país.
Una iniciativa adicional que vale la pena destacar es el Plan Nacional para el Hidrógeno. Cuenta con una asignación de cerca de 40 millones de euros para diseminar plantas piloto a lo largo de todo el país. Este plan espera contribuir para que Brasil se convierta en un productor competitivo en 2030 y consolide varios hubs de hidrógeno en 2035.
La Comisión Europea invertirá 2.000 millones de euros en Brasil para desarrollar el hidrógeno verde
El potencial de Brasil ha despertado el interés en otras partes del mundo. Durante una visita oficial, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anunció la inversión de 2.000 millones de euros en el país para desarrollar proyectos de hidrógeno verde. La UE quiere importar 10 millones de toneladas de hidrógeno renovable para cumplir sus objetivos de transición energética, y para ello, confía en construir un mercado transatlántico con socios como Brasil.
Este país puede liderar la industria del hidrógeno renovable en Latinoamérica. Su músculo económico e industrial, su experiencia con energías renovables y su riqueza en recursos naturales son aspectos que le avalan.